2006

La aventura deja de serlo y se convierte en una empresa. Nroot invierte en sus propias oficinas y amplia su plantilla.

Por el camino se obtiene una creciente base de clientes, con un índice de fidelidad cercano al 100% y se compatibilizan los proyectos de clientes con las inversiones en infraestructuras que permiten a Nroot convertirse en una empresa con buenos cimientos.